¿Porque se unieron la farmacia y la ortopedia?
La unión entre la farmacia y la ortopedia surgió como una respuesta a varias necesidades y oportunidades dentro del sector de la salud, tanto desde una perspectiva de negocio como de servicio al cliente. A continuación te explico los 4 motivos principales:
1. Conveniencia para los Clientes:
- Acceso Integral a Productos de Salud: Al combinar una farmacia y una ortopedia en un solo lugar, los clientes pueden acceder a una amplia gama de productos de salud, desde medicamentos hasta dispositivos ortopédicos, en una única visita. Esto es particularmente útil para personas mayores o con movilidad reducida, que a menudo necesitan tanto medicamentos como productos de apoyo físico.
- Servicio Completo: Los clientes pueden recibir asesoramiento sobre medicamentos y, al mismo tiempo, obtener recomendaciones para productos ortopédicos basicos que podrían necesitar, como muletas, fajas o plantillas, sin tener que desplazarse a diferentes establecimientos.
2. Expansión del Negocio Farmacéutico:
- Diversificación de Servicios: Para las farmacias, integrar una ortopedia representó una oportunidad de diversificación. Añadir productos ortopédicos a su oferta les permitió atraer a un segmento más amplio de clientes y generar nuevas fuentes de ingresos.
- Adaptación al Mercado: Con el envejecimiento de la población y el aumento de enfermedades crónicas, hubo un crecimiento en la demanda de productos ortopédicos. Las farmacias que incorporaron servicios de ortopedia pudieron aprovechar esta tendencia y mantenerse competitivas en un mercado en evolución.
3. Regulaciones y Políticas de Salud:
- Facilidad de Acceso: En algunos países, las políticas de salud y las normativas permitieron y fomentaron la integración de servicios ortopédicos en farmacias, con el fin de hacer que los productos ortopédicos básicos sean más accesibles al público general.
- Requisitos Legales y Profesionales: La especialización adicional en ortopedia por parte de farmacéuticos también respondió a regulaciones que permitían a estos profesionales ofrecer productos ortopédicos básicos sin necesidad de una formación tan extensa como la requerida para un técnico ortoprotésico, pero siempre dentro de ciertos límites.
4. Evolución del Rol del Farmacéutico:
- Ampliación del Rol Profesional: El rol del farmacéutico ha evolucionado más allá de la simple dispensación de medicamentos. Los farmacéuticos están ahora más involucrados en la gestión integral de la salud del paciente, lo que incluye la recomendación de productos ortopédicos que puedan mejorar la calidad de vida de sus clientes.
- Asesoramiento Completo: En una farmacia ortopedia, el farmacéutico puede ofrecer un asesoramiento más completo y personalizado, orientando al cliente no solo en el tratamiento farmacológico, sino también en el uso de productos ortopédicos que complementen su tratamiento.
La fusión de la farmacia con la ortopedia fue impulsada por la demanda del mercado, la conveniencia para los clientes y la oportunidad para las farmacias de expandir sus servicios y mejorar su oferta. Esto permitió que los clientes accedieran de manera más fácil y rápida a los productos y servicios necesarios para su bienestar general.
¿Qué tipo de productos encontraremos en una farmacia ortopedia básica?
En una farmacia ortopedia, los productos ortopédicos que se suelen ofrecer tienden a ser más básicos en comparación con los que encontrarías en una ortopedia especializada. Estos productos básicos suelen estar dirigidos a necesidades comunes de apoyo, rehabilitación, y confort, y generalmente no requieren un alto grado de personalización. Algunos de estos productos incluyen:
Muletas y bastones:
- Muletas axilares y de antebrazo.
- Bastones con diferentes tipos de empuñaduras y bases (simples, cuádruples).
Fajas y soportes ortopédicos:
- Fajas lumbares y abdominales.
- Rodilleras, tobilleras, coderas y muñequera elásticas o con refuerzos básicos.
- Collarines cervicales blandos.
Sillas de ruedas básicas:
- Sillas de ruedas plegables estándar, sin características avanzadas o personalizables.
Andadores:
- Andadores básicos de aluminio, con o sin ruedas.
Plantillas ortopédicas estándar:
- Plantillas prefabricadas que no requieren un molde específico del pie.
Calzado ortopédico básico:
- Calzado ortopédico estándar o para personas con problemas leves de movilidad, sin personalización.
Cojines antiescaras:
- Cojines de espuma o aire para prevenir úlceras por presión, pero generalmente de tipos y tamaños estándar.
Productos de ayuda a la movilidad:
- Elevadores de inodoro, asientos de ducha y barras de apoyo.
Medias de compresión:
- Medias elásticas de compresión graduada, utilizadas para mejorar la circulación sanguínea en personas con problemas venosos.
Ortesis blandas:
- Soportes o férulas blandas para el codo, muñeca o rodilla, que no requieren ajuste a medida.
Estos productos son de uso común y no suelen requerir la intervención de un especialista en ortopedia para su selección o ajuste. Sin embargo, para productos más complejos, como prótesis personalizadas, ortesis rígidas ajustadas al cuerpo, sillas de ruedas especializadas o dispositivos de apoyo hechos a medida, se recomienda acudir a una ortopedia especializada donde se pueda recibir un servicio más completo y personalizado.
